Región Amazonas

El descubrimiento de dos complejos de una pirámide antigua cerca de la ciudad de Jaén, Cajamarca, muestra que la arquitectura monumental se había extendido a través de los Andes y hasta bien entrada la selva muchos años antes de la llegada de los españoles.
El montículo más grande, más de un acre en su base, fue invadido por la vegetación y utilizada por gente del pueblo moderno como un basurero y letrina antes de que el arqueólogo bagüino Quirino Olivera (Amigos del Museo de Sipán), empezó a excavar allí.
Pronto se encontró evidencia de la construcción a gran escala - paredes de hasta tres metros de espesor, rampas, y los signos de las fases sucesivas de construcción que se remonta por lo menos 2.800 años.
"La gente ha asumido la arquitectura monumental, nunca llegó a la selva. Este descubrimiento demuestra que hizo", dice Olivera. "Para construir estas estructuras, las personas deben haber tenido conocimiento de la ingeniería y diseño, y una gran fuerza de trabajo estable. Hasta ahora, se suponía que vivían en chozas hechas de troncos de árboles y hojas."
Se encontró en la pirámide la tumba de un hombre de alto estatus que, en su entierro alrededor de 800 aC, fue decorado con las conchas de los caracoles de tierra a unos 180º. Una capa de caracoles cubierto el torso del hombre, y más conchas adornaba su cabeza y las extremidades. El hombre fue probablemente un curandero o sacerdote de algún tipo, dice Olivera.
Se encontró conchas de moluscos marinos en otra tumba cercana, testimonio de los lazos comerciales de disponibilidad de la costa sobre los Andes a la selva. Los hallazgos sugieren que, junto con la sofisticada arquitectura, el culto se había extendido lejos de la costa siglos antes.
(Condensado de: http://www.archaeology.org/1101/topten/peru.html)