Gregorio Santos ganó las elecciones en Cajamarca pese a que estará 14 meses de prisión preventiva por delitos como asociación ilícita para delinquir, cohecho y colusión agravada.
Pero ¿cómo explicar el fenómeno político Gregorio Santos? Simple. El cajamarquino, sobre todo de la zona rural –el 70% de la población electoral–, lo ve como un héroe de historietas sin escudo ni espada. Admirado e idolatrado. Que siempre se movilizó con los campesinos y se enfrentó a un poder económico que mucha gente ve como abusivo que es el que representa la minera.
"Aquí en la región pesa muy fuerte el sentido anti Lima por el centralismo excesivo y por el intento de quitarle más autonomía todavía a las regiones. Además, el pueblo quiere a Gregorio porque nació de una familia de ronderos. Este triunfo es un llamado de atención al Gobierno y a Ollanta Humala, que pensó que encarcelando a nuestro líder este movimiento se quedaba sin piso. Muchos piensan que solo somos unos 'cholos tirapiedras', pero no saben que también pensamos", dice en voz alta, y desafiante, Segundo Mendoza, el ideólogo y personero legal del MAS, quien tiene fe que se haga justicia y pronto el Poder Judicial deje en libertad a su líder.
Porfirio, el hombre
Porfirio Medina es quien tendría que asumir la presidencia y Cajamarca se quedará sin vicepresidente. Gregorio Santos se convirtió en la primera autoridad elegida imposibilitada de asumir su cargo. (La República)
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